Usted está aquí
Investigadora del GEA patenta nuevo tipo de zeolita
Continuando con una exitosa línea de trabajo que ha sostenido desde 1997, la investigadora del Instituto de Geología Económica Aplicada, GEA, Vilma Sanhueza, patentó un nuevo proceso para la obtención de zeolitas.
La zeolita es un mineral alumino-silicato poroso, de origen natural o sintético, que tiene aplicaciones como intercambiador iónico, carrier de fármacos y catalizador o soporte de catalizador.
Estas dos últimas son las funciones a las que está destinada la nueva zeolita creada por la Doctora Sanhueza y cuyo proceso de obtención fue patentado por el Instituto Nacional de Propiedad Intelectual, Inapi.
Se trata de una mordenita un tipo de zeolita- generada a partir de diatomitas, un material resultante del proceso de fosilización de algas unicelulares, que tienen alto contenido de sílice.
Existen entre dos mil y tres mil morfologías distintas de diatomitas. La principal característica (de la diatomita) es que es macroporosa y por eso es usada como material filtrante en jugos y vinos y también se usa, por ejemplo, como soporte de la nitroglicerina, de modo que al transportarla de un lugar a otro, reduce el movimiento y el riesgo de explosión, explicó la Doctora Sanhueza.
La nueva mordenita en cuyo proceso participaron también las doctoras Ursula Kelm y Ruby Cid- está orientada específicamente a la industria petroquímica, donde puede ser usada para la refinación de petróleo, como catalizador o soporte de catalizador o en el proceso de craqueo (la reducción de moléculas grandes a pequeñas) en hidrocarburos.
Este tipo de zeolita como señaló la investigadora- también tiene aplicaciones en el área farmacéutica, donde puede ser utilizada como un carrier (portador) de medicamentos de liberación controlada, como lo es el MCM 41, otra zeolita patentada por la doctora Sanhueza.
La materia prima de esta zeolita se encuentra en la forma de una "roca" que, en primer término es llevada a molienda, para obtener un granulado que más tarde es procesado en un reactor para obtener el material con la estructura adecuada a la función que se le quiere dar.
De este modo, la investigadora amplía sus creaciones en el área de zeolitas, que partieron con la ZSM-5, una zeolita que permite convertir alcohol en gasolina sintética. Luego vendrían una primera mordenita (para el tratamiento de benceno y tolueno), ambas patentadas; una versión mejorada de ZSM-5, el carrier de fármacos MCM-41, la zeolitas A sódica (NaA), un intercambiador iónico que remplaza el fosfato en los detergentes de ropa y las dos zeolitas creadas a partir de las cenizas del Volcán Chaitén phillipsita y merlinoita- con uso en el tratamiento de aguas contaminadas, todas patentadas.
La zeolita es un mineral alumino-silicato poroso, de origen natural o sintético, que tiene aplicaciones como intercambiador iónico, carrier de fármacos y catalizador o soporte de catalizador.
Estas dos últimas son las funciones a las que está destinada la nueva zeolita creada por la Doctora Sanhueza y cuyo proceso de obtención fue patentado por el Instituto Nacional de Propiedad Intelectual, Inapi.
Se trata de una mordenita un tipo de zeolita- generada a partir de diatomitas, un material resultante del proceso de fosilización de algas unicelulares, que tienen alto contenido de sílice.
Existen entre dos mil y tres mil morfologías distintas de diatomitas. La principal característica (de la diatomita) es que es macroporosa y por eso es usada como material filtrante en jugos y vinos y también se usa, por ejemplo, como soporte de la nitroglicerina, de modo que al transportarla de un lugar a otro, reduce el movimiento y el riesgo de explosión, explicó la Doctora Sanhueza.
La nueva mordenita en cuyo proceso participaron también las doctoras Ursula Kelm y Ruby Cid- está orientada específicamente a la industria petroquímica, donde puede ser usada para la refinación de petróleo, como catalizador o soporte de catalizador o en el proceso de craqueo (la reducción de moléculas grandes a pequeñas) en hidrocarburos.
Este tipo de zeolita como señaló la investigadora- también tiene aplicaciones en el área farmacéutica, donde puede ser utilizada como un carrier (portador) de medicamentos de liberación controlada, como lo es el MCM 41, otra zeolita patentada por la doctora Sanhueza.
La materia prima de esta zeolita se encuentra en la forma de una "roca" que, en primer término es llevada a molienda, para obtener un granulado que más tarde es procesado en un reactor para obtener el material con la estructura adecuada a la función que se le quiere dar.
De este modo, la investigadora amplía sus creaciones en el área de zeolitas, que partieron con la ZSM-5, una zeolita que permite convertir alcohol en gasolina sintética. Luego vendrían una primera mordenita (para el tratamiento de benceno y tolueno), ambas patentadas; una versión mejorada de ZSM-5, el carrier de fármacos MCM-41, la zeolitas A sódica (NaA), un intercambiador iónico que remplaza el fosfato en los detergentes de ropa y las dos zeolitas creadas a partir de las cenizas del Volcán Chaitén phillipsita y merlinoita- con uso en el tratamiento de aguas contaminadas, todas patentadas.